Entrenamientos de confianza, por Roberto Palomar

Antes de cada gran competición, tanto los deportistas de élite como los populares realizan sesiones especiales. Son los llamados "entrenamientos de confianza". Test que sirven para tener una idea aproximada del estado de forma en el que uno se encuentra y de las garantías de éxito para acometer la empresa tanto si luchas por el podio como por acabar dignamente. Alguno de estos entrenamientos, por exigentes, son míticos. En la comunidad de atletas todavía se recuerda un rodaje infernal de Martín Fiz, Alberto Juzdado y Diego García en la carretera de Cotos a Navacerrada. El ritmo fue demoledor y les reafirmó en sus convicciones. Aquello acabó con los tres maratonianos copando el podio del Campeonato de Europa de Atletismo en Helsinki, en el 94. Portada inolvidable de MARCA, por cierto.

Los "globeros" y atletas populares también tenemos nuestros test. Ese medio maratón, a tres semanas del gran día, esas series al 90% poco antes de la San Silvestre... Recuerdo que, con motivo del Ironman de Lanzarote, yo mismo me monté mi medio Ironman casero para saber dónde estaba en mi proceso de preparación. Lo coloqué un par de meses antes de la prueba porque quería saber si, con lo que estaba entrenando, tendría garantías de acabar. No me sacó de dudas pero tampoco me restó confianza. Al contrario. Me enseñó que la natación iba a ser un trámite, me mostró dónde iba a sufrir (en el maratón), me dijo dónde estaba más fuerte (la bicicleta la completé con facilidad el día del test) y me obligó a ser positivo en las ocho semanas de trabajo que aún tenía por delante. Aquel "entrenamiento de confianza" no se equivocó un ápice: en el Ironman me quité la natación de encima sin desgastarme, disfruté pedaleando en la vuelta a la isla y las pasé putas corriendo. Pero me llevó a meta tener las ideas claras y una mentalidad positiva, labrada sin duda en las sesiones del plan.

Justo ahora estoy con los "entrenamientos de confianza" para la Titan Desert. Voy retrasado y tenía que haber empezado antes, pero la agenda no da para más. Fundamentalmente, los entrenamientos de confianza son las salidas largas, simulando una etapa. El domingo estuve cinco horas encima de la bicicleta, parando solo un par de veces a orinar, comiendo y bebiendo encima de la máquina. No fue mal del todo porque acabé relativamente entero. Las dos últimas horas incluso subí la velocidad media. Para reafirmar las sensaciones, al día siguiente, sin recuperar del todo, rodé dos horas a buen ritmo y vi que había asimilado bien la kilometrada del día anterior. El único "pero" fue el culo. Pensé que lo tenía más hecho porque practicamente no he dejado de andar en bici en todo el año. En la Titan Desert la principal causa de abandonos son las llagas en el trasero. Hay que mimarlo al máximo con una buena hidratación, cremas y vaselina. Pero el "entrenamiento de confianza" me dio eso, confianza. Espero hacer un par de ellos o tres más, llegando si puedo a las seis horas. Tengo tiempo hasta el día 21. Luego, bajaré el pistón para estar fresco. El 27 cogemos el avión a Marruecos y el 28 empieza el baile.

Tenemos de todo. El equipo GAES me hizo llegar parte del material que utilizaremos en la carrera. Tenemos de todo: equipaciones, prendas de recuperación, productos de nutrición para antes, durante y después de las etapas... No hay excusas. Puede que lo más llamativo sea la mochila de hidratación, Fundax, fabricada en piel de bovino y con conexión directa a la botella, sin tener que rellenar una bolsa. Y lo más peculiar, desde luego, el colchón de playa para dormir en la etapa maratón.Como dice Tony Pérez, nuestro coordinador, "vamos como ministros".

Aquí un amigo. Mi amigo Luis Polo va a correr el maratón de Viena este fin de semana y lo hará con un fin solidario. Se puede apostar por el tiempo que hará y lo recaudado irá a la Fundación Cadete, que ayuda a niños con todo tipo de discapacidad. En París con siguió 3.020 euros y ayudó a una niña con parálisis cerebral para la adquisición de una silla de ruedas completa. En Roma logró reunir 4.395 euros y ayudó a tres niños de 11, 6 y 2 años, para sillas de ruedas y ortopedias.

SOLO tenéis que hacer una donación y APOSTAR por la marca de tiempo (horas, minutos, segundos) que creéis que va a hacer Luis y enviar un e-mail a isantias@fundacioncadete.org, indicando vuestro nombre y un tiempo a partir de  03:00:00Las donaciones se realizan enviando una transferencia al número de cuenta La Caixa: 2100-8646-92-0200043293 a nombre de FUNDACION CADETE, indicando en el concepto "MARATON DE VIENA".
Las dos personas que más se aproximen a la marca de tiempo real sin pasarse, ganarán premios donados por SONY XPERIA y MELIA AVENIDA DE AMERCIA