Creencias

“NUNCA creas en NADA”

Nunca creas en nada sin HABER alcanzado el entendimiento de la propia EXPERIENCIA, y su conocimiento dentro de TI mismo.

Lo que CREEMOS se convierte en PILARES de nuestra vida, sobre los que asentamos nuestras acciones, comportamientos y RELACIONES, y, en consecuencia nuestra REALIDAD, y nuestra vida.

Las CREENCIAS que tenemos se convierten en VERDADES dentro de nuestro SER.

Si somos muy PERMEABLES a asumir como propias las CREENCIAS de otros, nos convertimos en personas VULNERABLES.

Juntarnos con otras personas que tengan nuestras mismas CREENCIAS es un fuerte punto de ÚNION común, de disfrute y de crecimiento personal.

Pero ADQUIRIR las CREENCIAS de otros sin haberlas interiorizado, experimentado y alineado con lo que SOMOS, es una manera de EXCLAVIZARNOS a algo y alguien que no va con nosotros.

Vivir con esta IDEA presente de “NUNCA creer NADA”, en el sentido de asumir las cosas sin EXPERIMENTARLAS, permite ampliar nuestro pensamiento, y cuanto más ILIMITADO sea este pensamiento, más ilimitada podrá ser nuestra vida.

ENCAJAR esta manera de VIVIR es compleja a VECES en nuestro mundo, primero porque requiere de mucha ENERGIA el estar pendiente de todo lo que damos por ASUMIDO en nuestra vida, y segundo porque nuestra NATURALEZA es de carácter SOCIAL.

Tenemos que ser SOCIALES porque en ello va nuestra SUPERVIVENCIA y nuestro bienestar, ya que PERTENECER a un grupo nos aportan SEGURIDAD, y cubre nuestras NECESIDADES afectivas.

Y como en otras muchas SITUACIONES de la vida, puede que la virtud se encuentre en el EQUILIBRIO consciente, y en decidir a que GRUPOS deseamos pertenecer.